Indignación con la dueña incluso antes de llegar al albergue debido a que no entendía y le daba igual que fuera puente y todo lo que conlleva, atascos, retrasos y demás. Despues de una discusión telefonica fuerte con ella, más por su parte que por la nuestra, que en todo momento mostramos respeto, accedio de muy malas maneras a dejarnos el código de acceso para entrar al albergue. Si es por ella nos deja durmiendo en la calle. Además, para colmo, a parte de decirnos que ella no era la persona que limpiaba, efectivamente la encontramos dentro de la habitación y a algunas personas del grupo 22, la misma dueña, Blanca, no dejó de ninguna forma entrar al baño para poder asearse, a parte de tratarnos como vándalos y nosotros sin faltarle en ningún momento el respeto.Las instalaciones correctas, me da que NO vamos a volver, y después dejarnos casi 900 euros, muy agradecida la señora Blanca, no fue capaz tampoco de hacernos la factura pertinente.Y para colmo, el último dia, ayer, le faltaba el tiempo para echarnos del albergue sin tan siquiera haber establecido una hora de salida y con las maletas dentro del albergue.Lamentable la forma de proceder de la dueña