Una escuela fantástica. Hice un curso de español de dos semanas, 20 horas a la semana con el alojamiento incluido. Todo muy bien organizado desde el principio hasta el final. La escuela está muy bien situada, contiene todas las comodidades para estudiar el idioma con facilidad y disfrutar aprendiendo. Todos muy simpáticos, amables y siempre dispuestos a echar una mano en cualquier situación. La escuela ofrece no sólo las clases sino también diferentes actividades de ocio - yo, por ejemplo, elegí la visita a Gibralfaro, una a los baños árabes, otra al museo del vidrio y durante el fin de semana hicimos un viaje a Ronda. La oferta es bastante amplia para todos los gustos, cada persona tiene posibilidad de elegir lo que le guste más, aparte de los mencionados hay más viajes, por ejemplo, a Gibraltar, Sevilla, Granada, Córdoba. Les recomiendo mucho los baños árabes, que, aunque puede parecer un rollo, es en realidad muy relajante y merece la pena. En cuanto al alojamiento me dieron una habitación individual en el piso de cuatro habitaciones con la vista al mar, a 2 minutos de la playa.Y ahora al grano, lo más importante las clases. De las clases la escuela puede estar orgullosa. Los profesores, especialmente Paula y Luis, son muy abiertos, amables, simpáticos, muy profesionales con un conocimiento amplio y diverso. Todo esto permite que pudiéramos hablar de cualquier tema. El ambiente es muy relajado así que nadie se siente presionado al hablar o cometer un error. Lo más importante para mí fue que no se seguía solo el libro sino que cada lección estaba adaptada a lo que más les interesaba a los alumnos, en los campos que más necesitaban desarrollar.Para mí ha sido una de mis mejores vacaciones. Por eso me gustaría dar las gracias a la escuela como institución y a toda la gente que hace que la escuela funcione tan efectivamente.Saludos desde Polonia