Durante los últimos meses he comprado varias gafas en esta óptica y estoy muy contento de mi experiencia. Ls dependientes son gente joven, simpáticos, preparados y serviciales -especialmente el encargado Sergio y la muchacha que normalmente me ha atendido a mí, Laura M.-y te siguen prestando servicio como cliente después de haber recogido tus gafas por ejemplo, para ajustarte las patillas de las gafas cuando, como ha sido mi caso, te están muy flojas o te aprietan demasiado. Aparte de la amplia oferta de monturas, yo valoro muy positivamente que he podido pagar mis gafas a plazos con ofertas de financiación al 0 de interés.También me gusta la ubicación de la óptica en el CC Atalayas puedes aparcar en el parking subterráneo justamente debajo y que comparte sus amplios horarios, por lo que incluso puedes ir a la óptica los días festivos en que el Carrefour abre. Pero lo que, sin duda, más valoro de esta óptica es que, al poco tiempo de comprar mis primeras gafas allí, tuve un incidente con la rotura de un cristal de una de mis gafas nuevas y, a pesar de que yo no había contratado el seguro, me lo sustituyeron sin coste alguno para mí. Y es cuando te surgen los problemas y cómo te los atienden cuando mejor puedes valorar el servicio que te presta una tienda.